BREVE RECOPILACIÓN DE CHISTES DE "UN INGLÉS, UN FRANCÉS Y UN ESPAÑOL"
Qué tres patas pa' un banco.
Van un inglés, un francés y un español a una batalla, que resultó ser de la guerra de sucesión española, fallecieron los tres, porque las guerras son malísimas para la salud.
Un inglés, un francés y un español entran en un bar de Vladivostok:
Inglés: I'd like a tea and some baked beans, please.
Francés: Un croissant et un bol de lait chaud, s’il vous plaît.
Español: Buenos días, póngame un bocadillo de lomo con tomate y una cerveza, por favor.
Camarero ruso: Я ни черта не понимаю, что ты говоришь.
Una inglesa, una francesa y una española se reúnen en la terraza de una cafetería, pero esto no es un chiste, porque estos chistes tienen que ser siempre con hombres, siempre, ya está bien de querer cambiar las cosas, el maldito feminismo tiene que meterse en todo siempre, estos chistes siempre con hombres o no tienen gracia, por favor.
Un vaquero inglés, un indio español y un francés se encuentran en Austin. El vaquero en realidad no es inglés, es americano, pero descendiente de ingleses de pura cepa, el indio español es en realidad un tripulante de la Santamaría de cuando Colón llegó a América, se enamoró de una chica indígena y decidió que su vida tenía que estar allí, por lo que se casó con ella, se empadronó en Guanahani y después de esto pues comenzó a viajar por el continente y vivió muchos, muchísimos años, una cantidad exagerada de años, pensad que Colón llegó en 1492 y los ingleses llegaron después de 1600, y es que el español era viejísimo, la verdad, pero que muy viejo, y luego está el francés, que resultó ser una persona insulsa de la que no se sabía nada.
Un inglés, un francés y un español llegan a las puertas del cielo y les recibe San Pedro.
—Buenos días, ¿a qué debo su visita?
—Buenos días, yo soy Antonio y me ha atropellado un camión en la frontera entre España y Francia— Contestó el español.
—Pues yo soy Pierre, y también me ha atropellado un camión en la frontera entre España y Francia— Dijo el francés.
—Yo me llamo Thomas y me ha pasado exactamente lo mismo, fui atropellado por un camión en la frontera entre España y Francia— Añadió el inglés.
—Pero qué mala suerte habéis tenido, criaturas.
—Mala suerte ninguna, es que estábamos en un secta cuyo objetivo final para encontrar la salvación era morir atropellados por un camión en la frontera entre España y Francia, y así lo hicimos el día que nos lo indicó nuestro líder— Respondió sonriente Thomas.
—Es que si no profesáis la fe católica no podéis entrar.
—Pero si somos una escisión de la iglesia católica, no puede hacernos esto, al menos a mí, que soy un español de bien.
— Pues peor todavía, ya os estáis largando de aquí, vamos, fuera, rápido, que suelto a los perros y entonces sí que vais a correr, así que venga, cerrad la puta puerta por fuera y os vais a tomar por puto culo los tres, que no me quiero enfadar, vamos, que esto no es el coño de la Bernarda para que quiera entrar aquí cualquiera, arreando que es gerundio, que os vaya bien.
—¿Dónde ha quedado la caridad cristiana? Qué persona más desagradable.
—La caridad cristiana la tengo guardada en los huevos, gabacho de los cojones.
—Creo que no es necesario faltar.
—Crii qui ni is nicisirii filtir, ¡tú cállate, guiri!, si es verdad que eres de donde dices ser, porque aquí estáis todos hablando en español.
—Qué persona tan desagradable, hay que joderse.
—Déjalo ya Antonio, ojalá se muera pronto.
—Bueno, morirse, lo que es morirse, ya no creo que pueda, ¿no?
—Tú me entiendes, Pierre.
—Te entiendo, Thomas, claro que te entiendo.
—¡Largo de aquí, y que no os vuelva a ver aparecer!
Un shetter inglés, un bulldog francés y un mastín español van por la calle, se encuentran, huelen sus culos protocolariamente y continúan su camino sin que pase nada, porque ninguno de ellos es tan imbécil como los humanos de los chistes.
Creía que iba a ser el primero del día...
Me descojono!! 😁😁